Tratamientos fumígenos en camión tras la cosecha de frutos cítricos. D.T. Fomesa Fruitech

Publicado el 30 de noviembre 2022

La  recolección y el transporte de los frutos cítricos hasta el almacén suponen las dos fases más críticas, dentro de toda la cadena de producción y comercialización, desde el punto de vista de la patología postcosecha de cítricos.

 

Retraso permisible antes del tratamiento fungicida (RPAT)

 

Las principales enfermedades fúngicas de los cítricos (>90%) son debidas a lo que conocemos como agentes patógenos de herida (Penicillium digitatum e.g.) y, la mayoría de heridas -y microheridas-, se producen durante la recolección y transporte. Es en este momento cuando se producen la mayoría de las infecciones, y el tiempo (t) que transcurre entre la infección y el tratamiento fungicida es obviamente un factor limitante donde la norma, generalmente establecida, es tratar dentro de las 24 horas posteriores a la recolección (RPAT24h).

En muchas ocasiones se dan las circunstancias en las que los cítricos son producidos a una distancia significativa de las Centrales Hortofrutícolas donde se confeccionan. Un ejemplo de esto último es el caso de Andalucía donde, tras su recolección, son transportados muchas veces hasta almacenes sitos en las comunidades de Murcia y/o Valencia, dándose en ocasiones porcentajes de podrido muy superiores a los habituales (t>RPAT).

 

 

Por otro lado, la elección de la/s materia/s activa/s a emplear es otro punto crítico fundamental. Los mecanismos de acción de los fungicidas postcosecha son diversos y hay que tener en cuenta comparativamente su efectividad en cítricos, con una enfermedad en concreto, en cuanto a su capacidad curativa, preventiva y sobre la esporulación.

Puesto que, como hemos comentado anteriormente, la mayoría de heridas e infecciones se hacen durante la recolección y transporte, la capacidad curativa de un fungicida postcosecha para cítricos ha de ser excelente, y lo primero que debemos tener en cuenta para su elección en postcosecha: debemos contar con una herramienta que ataje (cure) las infecciones producidas en la fruta al entrar ésta en el almacén. En este sentido, el imazalil (IMZ) es el fungicida con mayor capacidad de control curativa para cítricos.

 

 

Por todo lo anteriormente expuesto queda claro que la agilidad y rapidez a la hora de tratar la fruta, una vez recolectada, y la elección de un tratamiento fungicida u otro, determinará en muchos casos el éxito en la posterior comercialización de los frutos y en que no se produzcan reclamaciones en destino.

FLC Technologies, dentro de su amplia gama de fungicidas, ofrece la posibilidad de realizar un tratamiento fumígeno a base de imazalil directamente en los camiones que transportan la fruta desde los campos donde es recolectada hasta su recepción en la central.

 

 

Así pues la aplicación de un tratamiento con FRUITFOG-I representa una ágil y rápida alternativa para el tratamiento de la fruta.

En un ensayo, se cuantificó la eficacia de este tratamiento: frutos de naranja cv. Navel Lane Late, de la misma parcela y recolectados el mismo día, se repartieron homogeneamente en dos lotes. Un lote fue cargado directamente en un camión frigorífico de 25 Tm donde se trató con FRUITFOG-I (Bote fumígeno 600 g, 25% imazalil), mientras que la otra mitad se cargo directamente en otro camión frigorífico sin realizar ningún tipo de tratamiento. Las condiciones de transporte fueron idénticas en ambos camiones.

 

 

24 horas después se recepcionó la fruta en un almacén sito en la Comunidad Valenciana. En él la fruta se conservó durante 20 días a 12ºC, tiempo tras el cual se realizó un conteo de podrido, en el que se pudo apreciar una reducción media de las podredumbres del 83%; por lo cual podemos concluir que la realización de tratamientos inmediatos a la recolección se presenta como una alternativa eficaz, y más aún en el caso de la utilización de FRUITFOG-I directamente en el camión, dada su elevada capacidad de control sobre las podredumbres, incluso sin recibir la fruta ningún tratamiento posterior a su llegada al almacén.